Es cierto que el mundo ha cambiado. Antes de esto nunca había visto un pedido subir solo en un ascensor.
Recuerdo cuando llegó la bolsa con el libro Cambia el mundo, de María Negro, y otros dos que había encargado. Hice el pedido en la tienda online de la librería de mi barrio, que ya funcionaba antes de la pandemia, cuando ya se me había pasado un poco el susto por aquellos repartidores que seguían en las calles, haciéndonos llegar pedidos que habíamos comprado desde casa.
Tardé en abrir este libro por cosas de la vida, pero la espera ha merecido mucho la pena.
La semana pasada, por fin, decidí que María Negro me iba a acompañar todas las mañanas mientras desayunaba. María y yo nos hemos visto un par de veces en persona, y sé todo lo que transmite cuando habla, así que leer su libro por las mañanas hasta me daba fuerzas para ponerme, unos minutos más tarde, a trabajar delante del ordenador.
El sábado terminé de leer su libro y no he querido esperar mucho antes de contarte mi opinión y por qué creo que este es un libro que tienes que leer.
Puede parecerte que el título da un poco de respeto.
¿Cambiar el mundo?
¡Como si eso fuera posible!
Es muy frecuente pensar que hay tanto que hacer que no podemos hacer nada. Se llama parálisis por análisis, y es lo que pasa cuando, en cualquier ámbito de tu vida, te dedicas solamente a leer, a consumir, a informarte, a trazar planes y posibilidades… en lugar de hacer algo. Es frecuente que nos quedemos paralizadas ante la magnitud de un problema. En este caso, además, el problema es bastante considerable.
La cuestión es, como siempre, una elección: puedes quedarte con los brazos cruzados por todo lo que hay que hacer, o ver todo lo que puedes hacer y comenzar por algún lugar. Podemos hacer muchas cosas, unas pequeñas, otras no tanto, en muchos frentes distintos.
Capítulo a capítulo María Negro nos va desgranando cómo podemos cambiar este mundo a través de nuestras acciones diarias, de las decisiones que tomamos cada día.
Este libro es un compendio de todo lo que puedes hacer para cambiar el mundo ahora mismo. Desde la manera que comes, a la forma en la que llenas tu armario, cómo te aseas, cómo vas a trabajar, cuánto te dejas influenciar por modas de todo tipo… y hasta cuánto te quieres y te valoras. Sí, quererse también cuenta porque… bueno, esta parte es buenísima y está todo en el libro.
¿Quiere eso decir que hay que hacerlo todo?
Ojalá pudiéramos, sería lo ideal, hacerlo todo perfecto… Pero además de ideal es bastante difícil. No obstante yo nunca he dejado que pensar eso me echara atrás. Hago todo lo que está en mi mano, y sé que hago unas cosas mejor, otras peor, y son estas últimas las que intento mejorar.
Mejorar a base de datos…
Una de las cosas que más me ha gustado de Cambia el mundo, de María Negro, es la cantidad de datos y bibliografía que aporta a cada momento. Es una de las mejores partes del libro, ya que le aportan solidez.
Además, conocer esas cifras es fundamental para tomar decisiones.
Mira, los datos impresionan. Te lo digo porque es verdad y para que no te pille de sorpresa. Cuando sabes el impacto que tiene la hamburguesa que te comes te piensas un poco más cuándo te comerás la siguiente, o si te la comerás siquiera. Pero si no lo sabes nunca llegas a hacer ese cambio.
… y de práctica.
Nadie nace sabiendo, por eso es fundamental conocer los datos reales de lo que compone nuestra basura, cómo y cuánta se recicla de verdad, quién fabrica tu ropa y en qué condiciones, cuántos productos químicos te comes sólo por usar ciertos productos higiénicos, qué impacto ambiental tiene que te compres el último aparato de moda, etc.
Pero también es primordial trabajar el día a día, y eso se hace pensando y reflexionando, entre otras cosas, cada compra. Al fin y al cabo, casi todo lo que necesitamos lo compramos, aunque hace apenas un par de generaciones esta proporción no era tan alta.
Para ayudarte con esas reflexiones el libro Cambia el mundo viene lleno de ejercicios y tablas, para que puedas completarlos y aprendas con qué patrones gastas, cómo te alimentas o qué tienes en el armario.
Lo ideal es que, con el tiempo, puedas hacer esos ejercicios de cabeza, y créeme que lo harás, y será antes de cualquier otra compra impulsiva.
Pequeños gestos, grandes cambios
Es el mantra de María Negro desde hace años. Es el mantra del poco a poco, del haz ahora, en lugar de pensar que no lo haces porque, total, esto que vas a hacer es muy pequeño [o «es sólo una botella», o «¿cómo va a afectarle al mundo que yo desee el último modelo de móvil?», o «inserta aquí esa frase que se te viene a la cabeza».]
Este libro recopila muchos gestos, unos más grandes que otros, pero todos abordables, para que podamos operar (de verdad) cambios en el mundo: llegar al mundo que queremos ver y disfrutar a través de la acción.
Porque pensando no hacemos nada. No haces nada.
Porque no dejes para mañana el cambio que puedas hacer hoy.
Porque puedes hacer grandes cosas desde tu día a día.
Porque si todos hiciéramos algo de esto, una, dos o tres de las cosas que aparecen en Cambia el mundo… el mundo cambiaría.
Te animo a ponerte en marcha, a leer Cambia el mundo y elegir alguno de los pasos que vas a dar para que el mundo, de verdad, cambie.
Gracias, María, por este imprescindible compendio de gestos, grandes y pequeños, para el cambio. Y por incluir RECOLECTORA entre las referencias de blogs de sostenibilidad al final de las páginas de tu libro. Me has emocionado.
María Negro es consultora en comunicación de negocios que impactan en positivo, y divulgadora sobre sostenibilidad.
Esta su página web, donde puedes consultar su perfil, servicios, y suscribirte a su newsletter.
Aquí tienes su perfil de Instagram
Su libro, Cambia el mundo (marzo 2020), lo publica Zenith y aquí puedes encontrar la librería más cercana donde comprarlo, on-line.